Lobos Sucios - cine
Lobos Sucios se estrenó en cines de toda España el 8 de Abril de 2016 con 47 copias y se situó entre las diez películas con mejor media por copia en España (7º en el top 10). La película tuvo su premiere mundial en la sección oficial de Mill Valley Int. Film Festival 2015 , uno de los más prestigiosos festivales norteamericanos, y su estreno nacional en la apertura del XX Festival Internacional de Cine de Ourense.
Una producción de Agallas Films, Dream Team Concept y Left Field Ventures.
Dirigida por Simón Casal de Miguel
Escrita por Carmen Abarca, Paula Cons, Felipe Rodríguez, Noelia del Río
Protagonizada por Marian Álvarez y Manuela Vellés. Con Pierre Kiwitt, Isak Ferriz, Ricardo de Barreiro, Thomas Coumann, Sam Louwick, Xose Manuel Esperante y Luisa Merelas.
Producida por Juan de Dios Serrano, John Engel y Jordi Mendieta.
Producción ejecutiva: Paula Cons
Producción asociada: Pancho Casal
Dirección de fotografía: Sergi Gallardo
Música: Sergio Moure
Dirección de Arte: Antonio Pereira
Sonido: Srdjan Kurpjel M.P.S.E, Guilhem Donzel
Vestuario: Marta Anta
Maquillaje: Oriane de Neve
Peluquería: Antonella Prestigiacomo
Notas del director
Galicia, 1944. La región ha sido convertida en un nido de espías por los servicios secretos nazis y aliados. Aquí los alemanes hallan algo que no había en el resto de Europa: wólfram, un mineral estratégico para la industria de guerra nazi. Esta historia transcurre en la principal mina de wólfram de Galicia, una gran instalación dirigida por ingenieros nazis y guardia civil española, donde conviven presos políticos que redimen sus penas y trabajadores libres procedentes de las aldeas pobres de los alrededores. Un sabotaje a la mina será el gran detonante de esta historia.
Cuando me llegó el guión de Lobos Sucios lo primero que me cautivó es el mundo al que me transportaba. Empezamos a documentarnos, a visitar minas, a caminar por sus túneles y a escuchar testimonios de la época. Comencé a imaginarme a los mineros trabajando en las vetas, entre el agua, el barro y el polvo, vestidos con monos de tela y zuecos de madera, helados de frío, fumando, tosiendo… mujeres separando mineral en hangares húmedos, junto a máquinas de triturado y separación, trabajando en mesas de lavado con los pies descalzos sobre tierra y serrín… todo estos elementos comenzaban a sugerirme las primeras sensaciones, las que vivieron las personas reales y las que vivirían nuestros personajes.
Y al lado de la mina, Casaio, una pequeña aldea encaramada a las montañas regida por condiciones naturales muy duras donde abundan, como en el resto de Galicia, la superstición y las creencias populares. Relatos que describen bosques poblados por almas que vagan por las noches convertidas en insectos y animales. Relatos que hablan de la vida secreta de los bosques gallegos. Relatos que leímos y que nos contaron nuestras abuelas y abuelos. Nosotros recogemos el testigo y hacemos nuestra propia interpretación.
Este es el mundo de la película, un entorno ultra-exigente donde cualquier fenómeno de la naturaleza desprende sensaciones sobrenaturales. Y entonces me di cuenta de lo primero que necesitaba para transportar al espectador a esta historia: inmersión. Y es en este mundo donde surgen las historias de amor de la película. Entre una madre y su hija, entre dos hermanas, y entre un hombre perdido, un hombre condenado y una mujer encerrada en sí misma. Me atraía enormemente este contraste entre la crudeza del entorno y de la época, y el coraje, el amor y el sacrificio que surgen en ella.
Nuestros personajes han vivido tiempos de hambre y sufrimiento. Viven rodeados de pobreza, enfermedad y falta de esperanza. Tienen necesidades urgentes y huyen de fantasmas del pasado. De imágenes que retumban en sus cabezas, una y otra vez, y los ahogan en resentimiento porque son incapaces de transformarlas. Hay un rechazo a conectar con el otro, a comprender lo que pide o a aceptar su ayuda, por miedo o desconfianza o porque supondría reconocer la propia vulnerabilidad. Son personajes incapaces de empatizar, incapaces de ponerse en la piel del otro, del diferente. Pero las circunstancias les obligan a iniciar este viaje, a pararse y mirar durante unos segundos a los ojos del que tienen enfrente. Y luego a mirar dentro de sí mismos.
Estos son los elementos que entran en colisión en esta historia. Personajes al límite en un ambiente de desolación, y con mucho que aprender. Personajes con un viaje interior pendiente, que se ven obligados a lanzarse a una aventura épica, de espionaje y robo de una mina, en la que se juegan la vida a cada paso y donde surgirá la magia, el suspense y la emoción de un relato que, al final, habla de la capacidad del ser humano de sacrificarse por los demás.
Extractos de prensa
Una selección sobre todo lo (bueno) que han dicho sobre nuestra película en prensa online e impresa.
ECartelera.com (Nota 7/10)
Cuando te dispones a ver una película basada o inspirada en hechos reales, da miedo, o al menos a mí me lo da. ‘Lobos Sucios‘ no decepciona, todo lo contrario. […] Su director, el debutante (aunque no lo parezca) Simon Casal, le ha dado un toque de misterio y brujería, además de un ritmo pausado que rompe en determinados clímax, con los que nos deja sobrecogidos.
Simón Casal demuestra con esta ópera prima que es un director con mucho potencial, al que no le faltarán oportunidades en un futuro, pues en solamente seis semanas, y no con mucho presupuesto ha conseguido un resultado bastante eficaz. Es verdad que no es redonda, y que tiene demasiados elementos (nazis, amor, brujería, estraperlo, guardia civil, lobos…) que no siempre confluyen, pero cuando lo hacen, nos trasladamos al bosque de tejos. Simon Casal, le ha dado un toque de misterio y brujería, además de un ritmo pausado que rompe en determinados clímax, con los que nos deja sobrecogidos.
Lo que más destacaría de ‘Lobos sucios’, además de que nos abre los ojos con este tema tan poco tratado, son las interpretaciones de las dos protagonistas. Hay momentos en los que la cámara se pierde en Marian Álvarez, y podemos ver el alma de su personaje.
La imagen de la película está muy conseguida, nos sentimos parte ella, creemos que estamos acompañando a Manuela en la mina, o a Candela durante sus paseos nocturnos por los bosques en los que ayuda a judíos a escapar por la frontera de Portugal. Toda la cinta tiene una atmósfera envolvente, como si fuera cosa de meigas.
Sermos Galiza (Andrés Castro)
Pódese sentir un frio e humidade que case traspasa a pantalla. […] Un viaxe no tempo apoiado nun reparto internacional e dúas actrices en estado de graza, Marian Álvarez e Manuela Vellés. […] non se chega a entender moi ben porque Lobos Sucios, se acontece na Galiza profunda dos anos 40 e nunha zona mineira, como é que non se fala apenas galego? […] Sexa como for é unha mágoa que Simón Casal deixara pasar esta enorme oportunidade de facer un filme redondo. Quizais na próxima ocasión… que de talento vai sobrado.
Cineralia.com
Lo mejor es el nervio que Simón Casal da a sus imágenes y el provecho que saca al impresionante paisaje gallego. Por otra parte, el realizador logra una estupenda interpretación de Marian Álvarez, que imprime fuerza a la protagonista, una mujer valiente que, como tantas de los años posteriores a la Guerra Civil Española, tuvo que enfrentarse casi sin ayuda a la dura realidad de un país asolado por el hambre y las secuelas del conflicto bélico.
Dfcinema.com
Simón Casal dirige una película con bastante personalidad, lejísimos de ser brillante pero con alma y muy buenas intenciones.
Lobos sucios, aun con su irregularidad, me parece una ópera prima digna de verse, rica en metáforas y con una más que interesante esencia mística que no siempre funciona pero que justifica perfectamente su final. Las interpretaciones de Marian Álvarez y Manuela Vellés, especialmente la de la actriz de La herida, son motivo suficiente para recomendar el visionado de esta película; sin embargo, Lobos sucios es mucho más que eso. Quizá su mayor virtud no sea otra que construir personajes bidimensionales, alejados de la caricatura pertenezcan al bando que pertenezcan.
Apetececine.com
Simón Casal dirige con pulso narrativo y logra arrinconar y oxigenar una historia a partes iguales logrando, en consecuencia, aquel resultado tan buscado y no tantas veces logrado en el séptimo arte que no es otro que el de mantener pegada la atención del espectador desde el minuto 0 hasta el último.
Lobos Sucios es una accesible e interesante ópera prima de Simón Casal, un director gallego que demuestra saber con esmero lo que cuenta y que dirige con mimo pero sin adornos a dos de las actrices más en forma del momento.
Blogdeentradas.com
Basada, en principio, en lo que iba a ser un documental, el argumento nos mantiene en tensión, nos emociona, nos produce angustia.
El director va contándonos el relato de forma casi mágica, con sus claros y sus sombras, con la intriga necesaria para tomar partido por los desfavorecidos, por los lobos sucios, y hace que comprendamos el esfuerzo de los protagonistas, y la calidad humana de estos personajes basados en personas reales, que nos ponen el corazón en un puño y la lágrima en el ojo, y la indignación en el recuerdo. Porque estas historias hay que darlas a conocer, porque el pasado no puede negarse, porque siempre habrá lobos que, aunque se ensucien, pelearán a muerte cualquier forma de injusticia.
Gran película de acción, de intriga, de amor, de lucha.
Praza.Gal (Maria Xosé Queizán)
Son moitos temas mesturados, xunto a actividades estratéxicas de gran importancia na II Guerra Mundial que se desenvolveron nun pobo galego. Son feitos reais e a película ten un valor informativo, histórico, ético e estético. A fotografía magnífica e os efectos especiais axudan a configurar os lugares e a manter a expectación das persoas asistentes.
Celebro a chegada de cine e cineastas galegos que nos fagan sentir orgullo e nos interesen, ensinen e engaiolen con films coma Lobos Sucios.
Entaquillados.com
El filme funciona como un acertado thriller, un ejercicio entretenido, con varias escenas que harán que el espectador contenga la respiración y permanezca atento a la pantalla. ‘Lobos sucios’ rescata además una temática poco explotada en la industria española como es el cine de espías, adaptándola a nuestro contexto con mucha solvencia y ritmo.
Brillantes interpretaciones por parte de los protagonistas. Destaca especialmente una Marián Álvarez en estado de gracia, que asombra con un personaje seco, místico, duro, que llena cada plano con su mirada, emotiva, estremecedora y sincera. Notable también el trabajo de Manuela Vellés, con un papel más amable y un entregado Isak Férriz.
Excepcional uso de la banda sonora y la fotografía, que incrementan la veracidad y la inmersión en el relato, trasladando al espectador a una tierra húmeda y gris, bella y desoladora, lugar de sacrificios, de supersticiones y creencias, de elocuentes silencios.